Aunque a primera vista parecen perfumes, al abrir las elegantes cajas de color tierra, aparecen 20 saquitos artesanales mate, piperita o cedrón. Así, con mucho diseño y apuntando a mercados premium, se lanzó José, la línea de infusiones de origen argentino que hoy se vende a 13 euros en tiendas exclusivas de París y Londres. "Estamos convencidos de que Argentina tiene que empezar a vender productos que la distingan de la soja y los cereales, y que se pueden desarrollar productos que posean un agregado como el diseño", sostuvo Alejandro Pitashny, uno de los fundadores de José.
A su lado, Pablo Pinkus, su amigo y socio, cuenta que decidieron lanzar el producto después de la crisis del 2001.
Por eso, prefirieron invertir sus ahorros y con apenas 4.000 dólares hicieron un muestrario de las hierbas que iban a trabajar, pero con el packaging terminado y la imagen de la marca ya definida, gracias a que Noe Golomb, el tercer socio, es diseñador.
Fue entonces cuando decidieron trabajar con elementos orgánicos, que resultan más rentables y se cotizan mejor en el exterior. "Lo orgánico no es el único elemento del producto, pero le da más calidad", dijo Pinkus.
Así, eligieron a cinco proveedores que son los que hoy les venden la materia prima que ellos hacen embolsar de manera artesanal en la envasadora en provincia de Buenos Aires.
"Acá sólo se puede tomar José en algún hotel o restaurante", contó Pitashny. Y aunque no se animó a dar números, admitió que estos productos generan "el doble o el triple" de ganancia que las infusiones tradicionales.
Por Candelaria de la Sota
Fuente Diario Clarín