Será un plan trienal que la autopartista afrontará con recursos propios. “Si tuviéramos una banca de fomento como el BNDES brasileño, con tasas del 3% anual, seguramente podríamos hacer la inversión en un año”, declaró el Ing. José Luis Basso. Un ambicioso plan de inversiones pondrá en marcha Basso SA a partir de 2008, con el fin de aumentar su capacidad instalada. Con ese fin, la valvulera con sede en Rafaela destinará 30 millones de pesos a lo largo de tres años, para ampliar sus metas de producción y aumentar su participación en el mercado local e internacional de válvulas para motor. El anuncio fue realizado por el Ing. José Luis Basso, presidente de la autopartista rafaelina, en el marco de la 13º Conferencia Anual de la Unión Industrial Argentina, que se realizó en el Hotel Sheraton, de Pilar. “Tenemos nuevos contratos en marcha con un par de terminales, y para afrontarlos vamos a tener que ampliar nuestra capacidad instalada”, dijo el Ing. Basso, en declaraciones a la prensa.
En la actualidad Basso es la única fabricante de válvulas para motor de capitales nacionales. Produce anualmente 18 millones de piezas y sus previsiones de crecimiento están en el orden del 15% anual. Pero apunta a seguir aumentando su producción e incorporar la atención a nuevos mercados. Estos se sumarán a Peugeot, su principal cliente; el gigante norteamericano de la maquinaria agrícola John Deere; y a dos fábricas que son íconos para los fierreros: la italiana Ferrari y la legendaria Harley Davidson, entre otros.
Las plantas de Basso ya trabajan en turnos durante las 24 horas del día e inclusive también durante los fines de semana. Frente a los nuevos desafíos que plantea el crecimiento, se hace evidente la necesidad de efectivizar importantes inversiones, que Basso afrontará con recursos propios.
Precisamente uno de los temas que más se discutió en la 13º Conferencia de la UIA fue la necesidad de contar con un financiamiento que haga posible la aplicación de nuevas inversiones para sostener el desarrollo industrial del país. El caso de Basso es emblemático, porque refiere a la necesidad de nuevas inversiones para conquistar más mercados y aumentar la producción. Pero también es una excepción, ya que los 30 millones de pesos que se aplicarán en este plan trienal son propios de la empresa.
“Tenemos que aplicar fondos propios porque en la Argentina no existe el crédito a largo plazo. Con un banco como el brasileño BNDES todo sería mucho más fácil. Si pudiéramos tomar dinero a 10 años a una tasa de interés del 3% anual haríamos toda la inversión ya, en sólo un año, pero sin auxilio financiero no podemos arriesgarnos”, señaló el Ing. Basso.
Precisamente plan de inversiones prevé la aplicación de diez millones de dólares anuales, con los cuales ya se definió la compra de tres equipos de última generación, dos de origen alemán y la otra italiana, que se aplicarán a la producción de válvulas. El empresario tiene previsto viajar en los próximos días a Europa para definir algunos detalles de la operación.
Las necesidades de ampliación de la superficie instalada no son un problema para Basso, habida cuenta que ya tiene comprados terrenos para expandir instalaciones en el Parque Industrial de Rafaela o bien en la localidad de Lehmann, ubicada a pocos kilómetros de la Perla del Oeste. “Poseemos una reserva de 80 mil m2 para desarrollar, por supuesto que no vamos a necesitar desarrollar toda esa superficie”, dijo Basso.
La valvulera rafaelina exporta el 90% de su producción hacia los mercados del exterior, con plantas en Rafaela, Lehmann y Buenos Aires, esta última destinada a la provisión de equipos de competición, a través de la marca MPI Racing Valves, si bien su insignia más tradicional es Válvulas 3B.