Luego del período de crecimiento de la economía más importante de los últimos 100 años, diversos economistas consideran que el aliento a las inversiones -en especial en infraestructura-, el desarrollo de exportaciones no tradicionales y una mayor eficiencia del Estado son los temas prioritarios de la agenda para los proximos años. "Necesitamos exportar industrias cerebro-intensivas, porque ya, por la tecnología, tampoco se necesita tanta mano de obra; hay que ir a las industrias que tienen que ver con la computación, con la nanotecnología", agregó el decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Carlos Degrossi, al afirmar que a mediano plazo "la Argentina tiene que plantearse una estrategia de renovación exportadora porque su mercado interno es chico y no alcanza con vender commodities".

Para Roberto Feletti, secretario de Infraestructura del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, "la calidad del Estado es el desafío mas grande" de los próximos años.

Indicó que para ello es preciso "una reforma tributaria, garantizar un financiamiento más sustentable en la renta y los patrimonios, y, desde el costado del gasto, tanto nacional como provincial, llevar adelante las reformas administrativas que aseguren su eficiencia".

Manuel Sánchez Gómez y Javier Alvarado, de la consultora MVA-Macroeconomía, destacaron que uno de los desafíos de este año será recrear las condiciones para que recupere impulso la inversión en infraestructura y energía.

Los economistas subrayaron que, dado el crecimiento que viene teniendo la industria, será necesario ampliar la capacidad de provisión de energía eléctrica.

La actividad económica tuvo en el trienio 2003-05 una expansión de 29,5 por ciento, con lo que superó las mejores marcas previas, que eran de 28,1 por ciento en 1991-93 (primeros años de la convertibilidad) y 27,7 por ciento en 1945-47 (último año del gobierno de facto surgido en 1943 y primeros dos de la presidencia inicial de Juan Perón), según un informe privado hecho sobre la base de datos oficiales.

El economista Orlando Ferreres señaló que este crecimiento se debe a "una combinación de factores entre los que se incluye el tipo de cambio alto, las exportaciones y el superávit fiscal".

Agregó que "los números son los mejores desde el perído 1903-05", cuando la economía creció 43 por ciento, al tiempo que alertó sobre la necesidad de ampliar inversiones para sostener el crecimiento.