Los shopping centers quieren convertirse en el nuevo canal de exportaciones para los negocios minoristas que albergan. Siguiendo los pasos de algunas cadenas de supermercados como Wal-Mart o Carrefour, que ya facilitan el envío al exterior de productos de sus proveedores locales, ahora el grupo IRSA puso en marcha un mecanismo similar con su shopping Buenos Aires Design Center.
"La idea surgió como una forma de otorgarle un servicio adicional al cliente, partiendo de la gran afluencia del turismo internacional que tiene el shopping", señaló Ramón Villaveirán, director del Design Center. El ejecutivo destaca que el shopping de Recoleta se convirtió en la principal atracción para el turismo internacional, superando propuestas que en teoría podrían parecer más fuertes, como el Patio Bullrich o Paseo Alcorta.
En la actualidad, de los $ 85 millones anuales que factura el centro comercial, aproximadamente un 15% ($ 12 millones) es generado por compras de extranjeros y en la empresa quieren incrementar esta cifra facilitando los trámites de exportación de productos.
"A diferencia de otros shoppings, en el caso del Design muchas de las compras son grandes paquetes, artículos de decoración o muebles que presentan grandes dificultades para su traslado, con lo que cobra interés este tipo de servicio de transporte", explica Villaveirán. Para comenzar a ofrecer el nuevo servicio, el shopping cerró un par de acuerdos con empresas de logística (Federal Express y Andreani) que son las que se encargan de realizar el transporte de los productos, a partir de los pedidos que levantan los propios locales.
Además, como atractivo adicional para los compradores extranjeros se suma el descuento por la devolución de impuestos (tax free), que en el caso de la Argentina alcanza el 16 por ciento. En la medida en que el proyecto del Design dé resultados, en el grupo IRSA no descartan copiar el modelo comercial en otros shoppings, aunque destacan que este tipo de exportaciones son más factibles de realizarse en el caso de los productos que son difíciles de transportar.
El shopping Buenos Aires Design está controlado por IRSA con el 51%, mientras que el restante 49% se reparte entre el Banco Provincia de Buenos Aires (45%) y la empresa holandesa ING (4%).
Por Alfredo Sainz
Fuente Diario La Nación