Exporta el 15% de la producción y pretende llegar al 50% en 2006. El laboratorio medicinal Filaxis se prepara para afrontar el desafío que se planteó hace dos años, cuando inversores españoles compraron un laboratorio local. Ahora mejora su planta de Martínez para dejarla en condiciones de aprobar las inspecciones sanitarias que exigen Estados Unidos y los países de la Unión Europea. "Existe un plan de inversión mediante el cual, en tres años, vamos a desembolsar 6,6 millones de dólares", dijo el CEO de Laboratorios Filaxis, el español Daniel Valtuena Maestre. "Queremos que la planta esté en condiciones de pasar las inspecciones de Europa y Estados Unidos. Nuestros objetivos más ambiciosos son acceder a mercados altamente regulados que son más rentables, aunque exigen más calidad", indicó.
Ex gerente en una firma multinacional y residente en Suiza, Valtuena Maestre quiso tener su propia empresa y decidió invertir en la Argentina en 2002. "Recuerdo que vinimos y buscamos el financiamiento tradicional. En los bancos nos miraban como si fuéramos retrasados mentales -agregó-. Finalmente pusimos el dinero por medio de personas amigas y hoy somos los dueños."
Filaxis, un laboratorio medicinal especializado en productos para tratamientos oncológicos y de sida, tuvo una facturación de 12 millones de dólares durante 2003 y proyecta para este año incrementar esa cifra.
"La producción se destina en un 85% al mercado local y el resto se exporta. Pensamos que en 2006 vamos a estar exportando el 50% de lo producido", dijo el presidente del laboratorio, Alfonso Camba. Además, informó que la empresa exporta actualmente a 13 países.
Las inversiones proyectadas estarán destinada realizar las mejoras exigidas por los organismos sanitarios de Estados Unidos y Europa para poder ingresar en esos mercados con los medicamentos producidos en la Argentina.
"La Organización Mundial de la Salud ya hizo una preinspección y aprobó la planta. Nuestra idea es que los productos de acá tengan la calidad como para ingresar en Europa y Estados Unidos", comentó el empresario español que se excusó de decir cuánto dinero pagó por la empresa en 2002.
"No se puede decir por una cláusula del contrato", sintetizó. Respecto de la producción, el laboratorio desarrolló este año en el país una línea de neurociencias, que será destinada a tratamientos psiquiátricos.
Para Valtuena Maestre, un amante del folklore local y habitual animador de peñas porteñas, "2005 será un año de tránsito, mientras que en 2006 pensamos ingresar en los mercados regulados más regulados".
Al referirse al mercado local, dijo que es "tremendamente competitivo, por no llamarlo descarnado", y que nos "ha sorprendido la cantidad de intermediarios que hay, los que finalmente terminan encareciendo el producto".
Por Diego Cabot
Fuente Diario La Nación