La fábrica de muebles de Eldo Omar Mosconi, comenzó a exportar muebles a Estados Unidos. La mercadería, estilo campo, es distribuida por una cadena comercial que posee una decena de sucursales en la región central de ese país. Las operaciones se iniciaron hace unos pocos meses cuando un empresario norteamericano ingresó a la página Web que posee el establecimiento cañadense. Luego de un primer contacto viajó a Cañada de Gómez donde observó atentamente los procesos de fabricación. Mosconi exporta a razón de cuatro contenedores mensuales. "Adaptamos un mueble de estilo campo al gusto norteamericano. Son idénticos a los que usaban nuestros abuelos, pero con una confección totalmente moderna. En total son cerca de 15 artículos los que estamos enviando", comentó el industrial.

En efecto, juegos de dormitorio, comedor, y sillas, entre otros componentes, son remitidos mensualmente. En la actualidad la totalidad de los muebles que posee para la comercialización son fabricados en sus dos plantas industriales que suman alrededor de 16.000 metros cuadrados.

Los diseños que presenta la fábrica son desarrollados con la utilización de software, máquinas y herramientas de última tecnología, fruto de una fuerte inversión realizada por el empresario durante los últimos años. En ese plan de expansión inauguró un paseo de compras con un local comercial de unos 6.000 metros cuadrados.

"La habilitación del local nos trajo aparejado la conquista de clientes que se acercaron por el solo hecho de estar en la ruta 9. Los visitantes provienen de las provincias más remotas. El impacto logrado fue mucho mayor al esperado", añadió.

Mosconi hace varios años que intenta remitir muebles al exterior. Concretó algunas operaciones en los países limítrofes, no obstante nunca cesó la búsqueda de mercados más estables. "Este empresario trajo una línea de alto consumo en EEUU, hicimos pruebas y le terminamos vendiendo", resaltó.

Si bien la fábrica de Mosconi opera en tiempo completo con cerca de cien operarios, al igual que otras pocas de su misma envergadura, no es el común denominador en el resto de los establecimientos. La convertibilidad sumada a la inundación de 2000 paralizó a muchas fábricas que estaban en actividad.

El mayor impacto fue la importación de muebles desde Brasil que llegó a copar más del 50 por ciento del mercado nacional. Los mayores esfuerzos de las industrias están orientados, ahora, en la confección de muebles con un diseño especial que los identifique.

En ese marco, hace unas pocas semanas se dio a conocer la formación de un consorcio de exportación formado por cuatro empresas locales para la fabricación de muebles macizos que saldrán al mercado con el respaldo del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
Por Walter Gasparetti
Fuente Diario La Capital de Rosario