La salida de la convertibilidad, hacia principios del año pasado, mejoró la posición competitiva de las empresas argentinas que orientaban sus productos hacia los mercados externos.
La fruticultura regional no quedó fuera de este esquema. Durante gran parte de la década del "90 la política monetaria implementada en el país no favoreció el desarrollo de las exportaciones valletanas. Hoy, con un esquema de flotación sucia, pareciera que los economías regionales intentan reposicionarse en los mercados internacionales. El tema de cómo lo hacen, es otra cuestión.
Haciendo un corte en el primer cuatrimestre del año y computando sólo las ventas consolidadas a ultramar, las estadísticas muestran un positivo desarrollo de las exportaciones valletanas.
Conforme con datos brindados por la terminal portuaria "Patagonia Norte SA", durante el primer cuatrimestre del último año de convertibilidad (2001) los embarques frutihortícolas alcanzaron las 294.248 toneladas. En los primeros cuatro meses de la presente temporada las exportaciones se ubicaron en las 388.362 toneladas, lo que muestra un crecimiento en las ventas en torno del 32% al comparar los períodos analizados del 2003 y el 2001, y del 11% si se relacionan los cuatrimestres de las temporadas 2003/2002.
Pero las estadísticas son sólo eso: estadísticas. Un aumento de las exportaciones no siempre se puede relacionar con mayores retornos para la actividad. Por otro lado, si bien el primer cuatrimestre del año marca una tendencia, la misma no es definitiva para toda la temporada.
Otro punto de análisis es el desarrollo que presentaron las exportaciones con la salida de la convertibilidad. Al analizar las ventas de cada una de las empresas de la región uno puede observar la disparidad de crecimiento existente (ver cuadro adjunto con detalle por empresa). La firma que mayor crecimiento presentó sobre sus ventas fue la cipoleña Ecofrut SA, al pasar de vender en el primer cuatrimestre del 2001 alrededor de 9.000 toneladas a más de 27.800 consolidadas en los primeros cuatro meses de este año, con un incremento superior al 200%.
Moño Azul SA fue la segunda empresa que mostró un crecimiento vertiginoso sobre sus exportaciones a ultramar, siendo el mismo de un 70%.
Pero lo llamativo de estas estadísticas es el aumento en la concentración de las exportaciones. Los números privados muestran que durante la temporada 2001 las cinco grandes exportadoras concentraban el 67,5% del total de las ventas externas hacia ultramar.
Hoy las cinco grandes firmas de la fruticultura manejan el 71,5% de las exportaciones. Son cuatro puntos porcentuales de diferencia entre una y otra temporada, lo que representa un volumen de fruta en torno de las 15.000 toneladas que se adicionaron entre las cinco exportadoras más importantes. (J. L.).
Fuente Diario Rio Negro