Las exportaciones de servicios en el mundo rondan los 4 billones de dólares (eran de 1,5 billones en 2000). Crecen a pasos acelerados.
Latinoamérica aún no llega a ser un protagonista de incidencia mayor: Brasil explica alrededor del 0,8% y es el más relevante actor de la región (México genera el 0,5%). En términos generales, Latinoamérica produce un 2,2% del flujo global de servicios internacionales, mientras Europa explica el 49%, América del Norte el 16% (Estados Unidos produce el 14,5% del total mundial), y Asia Pacífico, el 7% (China ya genera el 3,8% y la India el 2,7%).
En nuestro país, en 2010, las exportaciones de servicios produjeron 13.075 millones de dólares. Como reflejo de ese dinamismo las importaciones de servicios se elevaron entre nosotros en el año último a 13.820 millones de la moneda norteamericana. Esto produjo un déficit de 744 millones de dólares (en el año 2009, el déficit había ascendido a más de 1.000 millones con exportaciones de 11.029 e importaciones de 12.088 millones).
Estas exportaciones de servicios parecen estar mostrando un mayor dinamismo en los últimos años: las exportaciones de bienes crecieron en un lustro un 45%, mientras las de servicios lo hicieron un 68%. Es altamente probable que, amén de la competitividad intrínseca de algunos sectores, el marco normativo de referencia de los servicios se muestre mas confortable que el de los bienes como para explicar este fenómeno: no pagan derechos de exportación, no están sometidos a licencias, cuotas o permisos que ciertos bienes deben respetar y tienen menos dependencia de ciertos insumos para la producción que se muestran esquivos para algunas industrias.
Como reflejo de esto se advierte que, a la vez que las exportaciones de bienes crecen con menos fuerza en Argentina que en la mayoría de los países de la región, entre nosotros las exportaciones de servicios representan aproximadamente, en los últimos años, un 3,8% del PBI, porcentaje mas elevado que en Brasil o México, aunque mas pequeño que en otras economías de menor dimensión como Paraguay, Uruguay o Chile.
Considerando la composición de las exportaciones de servicios se observa que en Argentina el turismo es el que mas aporta en este negocio, ya que los viajes significan un 38% del total. Los servicios de transporte representan un 21% y complementan este gran conjunto. Otro rubro de relevancia es el de los servicios profesionales, empresariales y técnicos, que genera un 28% del total y, además de ellos, los vinculados a la informática y computación explican el 9% del total.
Comparando internacionalmente, los servicios referidos a los viajes tienen en nuestra canasta una incidencia 13 puntos mayor que en el promedio del comercio global, mientras también es 6 puntos porcentuales mayor que en el promedio mundial la incidencia de las exportaciones de computación, información e informática (en el mundo explica un 3,1% y en Argentina un 9% del total) y los servicios empresariales tienen una relevancia 4,7 puntos porcentuales mayor entre nosotros que en el promedio mundial. A la vez, como reflejo de otras ciertas debilidades que muestra nuestra economía, nuestro país es claramente poco importante en exportaciones de seguros, servicios financieros, regalías y licencias y aún servicios vinculados con la construcción.
La composición de los negocios internacionales va variando. Hace unos años, John Chambers, CEO de Cisco Systems, anticipaba que en una economía cada vez mas entretejida no se explicarán los resultados por grandes que derrotan a pequeños sino de rápidos que derrotan a lentos. Algunas actividades de la gran avenida de los servicios van entrando en ese entretejido. Son aquellos que pueden trabajar haciendo la diferencia en el valor y no en el costo. Por Marcelo Elizondo. Diario El Cronista.