Los exportadores argentinos buscan ampliar su penetración en el mercado brasileño a través de un nuevo modelo de comercialización de artículos de los sectores hospitalario y de marroquinería y cueros, con la apertura de un Centro Comercializador de Mercadería en la localidad de Porto Seco, en el Estado de Paraná. El centro funcionará como una ingeniería jurídica y financiera que permitirá que productores argentinos cuenten con stock en territorio brasileño al menor costo posible. El proyecto apunta a facilitar las exportaciones en una región que de por sí no tiene una cultura importadora y surgió del Consejo de Desenvolvimiento e Integración de la región sur de Brasil (CODESUL) y la Asociación de Importadores y Exportadores de la República Argentina (AIERA).
Santiago Gallo, secretario del CODESUL, dijo a Télam que el centro -que será inaugurado durante el segundo trimestre- "es algo inédito, una tentativa de encontrar un modelo que posibilite el ingreso de productos argentinos en una región donde el mayorista por lo general sólo compra si la mercadería está en el depósito".
"Son clientes que no están dispuestos a esperar plazos de entrega por modalidades comerciales que ya tienen adquiridas y esas dificultades, como son culturales, no se las puede vencer si no se encuentran mecanismos apropiados", explicó el argentino radicado desde hace dos décadas en Brasil y que trabaja para el gobierno del vecino país.
Según Gallo, "el centro debería estar funcionando en un plazo de 90 días o menos, aunque algunos productos tal vez demoren más por temas burocráticos".
"Se trata de proporcionar a las PyME una herramienta más, por lo cual creo que contaremos también con la participación de bancos de los dos países para la financiación del proyecto", reseñó.
Desde Porto Seco, ubicado a 1.600 kilómetros de Buenos Aires, se comercializará en un radio de acción de 600 kilómetros a partir de Maringá, lo que abarca aproximadamente a 60 millones de habitantes del sur de Brasil, una de las zonas con mayor poder adquisitivo del país.
"Es como si agregáramos dos Argentinas a la persona que vende sweters, carteras, ya que se trata de la región de Brasil que tiene el mayor producto bruto interno. En tanto, los productos argentinos son de calidad, cuestan más caros, y por ende necesitan llegar a un público de mejor poder adquisitivo", sostuvo el secretario de CODESUL.
Por su parte, Marcos Capellazi, superintendente de Porto Seco, explicó que el centro funcionará como una especie de "almacén en el interior del país, donde se efectúa toda la documentación para nacionalizar las mercaderías o para exportación".
Los productos podrán quedar en depósito por espacio de un año, lo que representa "una seguridad para el exportador argentino", expresó Capellazi.
A su turno, José Mazzitelli, vicepresidente de AIERA, dijo que los sectores seleccionados se tomaron en base a un estudio de inteligencia comercial de la Cancillería argentina.
También hay otros sectores interesantes -aunque no participarán en un primer momento del proyecto- como alimentación, autopartes, y cosméticos.
"La estrategia es juntar este centro de distribución con otras actividades culturales como presentación de tango, cursos de somelier, y otras acciones de promoción comercial", sostuvo Mazzitelli, sin dejar de hacer hincapié en la necesidad de "profesionalizar el sector privado".
El centro ofrecerá además una oficina para que los empresarios argentinos busquen compradores, mayoristas y distribuidores, y cuenten con una estructura de asesoría fiscal, jurídica y contable para el empresario argentino.