Vialidad Provincial realizó el llamado a licitación para la construcción de dos puertos de gran envergadura con capacidad para exportación e importación con una inversión inicial que supera los 40 millones de pesos y un plazo de construcción de un año y medio. Se trata de los nuevos puertos de Posadas y Santa Ana. El primero se construirá en el paraje Nemesio Parma, en la confluencia del arroyo Apepú y el río Paraná, aguas abajo de Posadas y tendrá las características de un puerto de cargas generales que operará con un piso inicial de 700 contenedores mensuales y mineral. En tanto, el de Santa Ana se ubicará en el mismo lote del antiguo puerto, en una superficie aproximada de 18 hectáreas, pero será transformado en un puerto cerealero y de cargas generales, adaptando las instalaciones existentes.

El precio tope para la ejecución de las obras se fija en 40.403.437,70 pesos, sin IVA y a valores referenciales del mes de julio. El presidente de Vialidad provincial, Orlando Franco, indicó que estas obras pretenden dotar Misiones y su hinterland (zona de influencia económica o comercial de un puerto) de dos terminales portuarias que operarán con buques feeders -barcos portacontenedores- y barcazas en todas las condiciones del río y su navegabilidad. El constructor deberá considerar los valores de altura de nivel de agua que asegure un calado para la navegación todo el año. Además, se prevé la conexión con la ruta nacional 12 -en el caso de Posadas desde el By Pass Arco-Garita- y con las vías del tren.

El puerto de Posadas contará con un muelle de 250 metros de frente y estará destinado básicamente a la exportación de yerba, té, tabaco, oleaginosas, cereales, pasta celulósica y papel de Alto Paraná, Piray y Papel Misiones, madera nativa e implantada y la importación de hierro, cemento, cal e insumos industriales varios.

En principio, tendrá capacidad para operar con 700 contenedores mensuales y se prevé un incremento anual del 30 por ciento. La terminal portuaria deberá contar con espacios destinados a cargas generales, contenedores refrigerados y cargas peligrosas y depósitos para los mismos. En el caso de Santa Ana, se recuperará el puerto cerealero, pero será de alcance internacional, ya que la idea es captar cargas de Paraguay y Brasil. “Estas obras generarán prácticamente un nuevo polo de desarrollo en la región con alcance internacional.

La provincia, conciente de la necesidad del desarrollo ha iniciado un nuevo proceso estratégico que conducirá a ubicarlo como uno de los principales centros logísticos del Mercosur”, dijo Franco. Misiones OnLine