El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) informa que luego de más de 7 años sin registrarse exportaciones de carne de conejo, durante 2002 se certificaron envios por 124 toneladas de carne fresca y muestras comerciales de menudencias y vísceras por un total de 491.000 dólares.
El principal destino para la carnes frescas de conejo es España hacia donde se registraron envíos por 93 toneladas y un valor de 375.000 dólares. También se exportaron 31 toneladas de este producto a Austria por 93.000 dólares. Además, con destino a Brasil, se registró la exportación de 1 tonelada de menudencias y vísceras de conejo por 23.000 dólares.
Paralelamente el SENASA ha recibido solicitudes para exportar carne de conejo doméstico a mercados de alta exigencia como los Estados Unidos, que no registra antecedentes de envío.
Para este tipo de producto, la faena se elabora bajo exigencias de muy alta seguridad, dado que no debe conllevar ningún riesgo sanitario y contar con una calidad microbiológica óptima.
Los cortes se envasan individualmente en envases primarios de polietileno y el conjunto en unidades de cartón, identificadas con el logo del SENASA y de la Unión Europea. Estos requisitos se enmarcan en la norma Comunitaria 91/495/CEE, que estipulan los países importadores del bloque para estas carnes.
Las plantas frigoríficas que se habilitan para carnes de conejo doméstico procesada, aplican un estricto control de Buenas Prácticas de Manufacturas (BPM) que son exigidas por el SENASA.