A pesar de que el peso recuperó algo de terreno frente al dólar después de haber tocado casi los $4 a mediados del 2002 y que el real se depreció fuerte a lo largo del año pasado por el efecto electoral, la Argentina conserva buena parte del terreno recuperado en materia de competitividad tras abandonar la convertibilidad.
“La paridad bilateral real con Brasil a pesar del proceso de dilución de los efectos de la devaluación en los últimos meses, aún se encuentra 44,3% por encima de los niveles de diciembre del 2001”, concluye un informe realizado por el Centro de Estudios Bonaerenses (CEB).
Al evaluar la evolución del peso a lo largo del año y su paridad frente al dólar, el trabajo remarcó que mientras que en diciembre del 2001 un real compraba el equivalente a 0,86 peso de enero del 2002, en abril -luego de la salida de la convertibilidad- ese valor pasó a 1,7 peso por real, lo que implicó una suba del poder adquisitivo de la moneda brasileña frente al peso de 97,2 por ciento.
Pero a partir de abril, hechos como la mayor incertidumbre pre-electoral y la crisis de confianza en Brasil, la consolidación de la inflación y la desaceleración del dólar en la Argentina a partir de julio, produjeron un retroceso en el poder de compra del real que consumieron parte de la devaluación nominal.
“En ese período, se evidenció una caída en la paridad bilateral real de 26,7%, es decir, un real pasó de comprar $1,7 a comprar sólo $1,24”, indicó el estudio.
Fuente: Diario Infobae