Los pronósticos parecen indicar que el 2003 será un muy buen año para las exportaciones agroalimentarias y en particular, para las cárnicas. A fines de este mes se cumple un año sin registro de focos de aftosa en el territorio nacional, y esta situación permitirá la reapertura de importantes mercados como los de Estados Unidos y Canadá. Días atrás, el empresario Víctor Tonelli auguró que en el 2003 podrían venderse unas 500.000 toneladas de carnes rojas al exterior, una cifra más que alentadora si se tiene en cuenta que el año pasado la cadena se encontraba desmembrada, con frigoríficos cerrados, productores desmoralizados y la confianza de los consumidores internacionales perdida.
Al respecto, la posible reapertura de América del Norte -en donde se comercializaban hasta el año pasado más de 20.000 toneladas de carne anuales- no es el único índice positivo que perciben los analistas del sector. En estos días los organismos de sanidad animal de Chile y Argentina ultimaron los detalles para el reingreso de los cortes locales al país trasandino, que antes del estallido de la crisis por la aftosa adquirió productos cárnicos de origen local por más de 100 millones de dólares.
Pero tradicionalmente la meca de los cortes argentinos ha sido la Unión Europea y en relación con este mercado también habrá novedades en el 2003. La cuota Hilton asignada por Europa a la Argentina es de 28.000 toneladas, pero el año que se inicia será un momento de negociaciones para intentar un aumento permanente de esta asignación. Por otra parte, está prevista para el primer trimestre la llegada de una comitiva de la Oficina Europea de Lucha contra el Fraude (OLAF) que tendrá la misión de fiscalizar los envíos que se están haciendo hacia el Viejo Continente.
Las proyecciones en los aumentos de las exportaciones cárnicas tienen como sustento la celosa custodia de la calidad y sanidad de los productos cárnicos argentinos.
Para el director del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el sector se encuentra en una época de "despegue" que se basa en la decisión de "hacer las cosas bien y por derecha".
La devaluación dejó sentir su impacto positivo en el sector, varios frigoríficos en todo el país reabrieron sus puertas recuperando puestos de trabajo, se permitió la importación de carnes argentinas en más de 56 mercados extranjeros y existen altas probabilidades de que esta cifra suba en los próximos meses. Todos estos factores deberán mantenerse y crecer y para ello será necesario mantener la seriedad en los controles sanitarios, la regularidad de la vacunación y el seguimiento incisivo de las normas de calidad sanitarias e higiénicas en las distintas etapas del proceso.
Para este año existen profundos debates y discusiones que deberán darse en el seno de la cadena: la puesta en marcha del dilatado proyecto del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna, la unificación de las voces representativas del sector y la promoción efectiva de los productos cárnicos, serán algunos de los temas a resolver en el 2003.
- Se duplicaron exportaciones
Las exportaciones de carnes alcanzaron el año pasado las 257.907 toneladas, un 94% más que durante el 2001, entre carnes frescas, procesadas, cuota Hilton, menudencias y vísceras.
El Ministerio de la Producción informó que durante el 2002, con 59 mercados reabiertos a las carnes bovinas procedentes de la Argentina, las exportaciones del producto sumaron 257.907 toneladas por 480.879.000 dólares, entre cortes Hilton, carnes frescas, carnes procesadas y menudencias y vísceras, contra 132.987 toneladas y 266.592.000 dólares en el 2001.
El año pasado los envíos cárnicos crecieron un 94% en volumen y un 80% en divisas con respecto al 2001, año durante el cual el país reconoció la existencia de fiebre aftosa, lo que significó el cierre de mercados internacionales.
De acuerdo con los datos registrados en el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), dependiente de esa cartera, del total de envíos durante el año pasado, los cortes Hilton hacia la Unión Europea, que recomenzaron el 1 de febrero tras la crisis de la fiebre aftosa, sumaron 48.215 toneladas por un valor de 194.962.000 dólares.
Las exportaciones de carnes frescas enfriadas y congeladas -no Hilton- sumaron 108.092 toneladas por un valor de 145.988.000 dólares. El Senasa también reportó exportaciones durante el año pasado de 45.573 toneladas de carnes procesadas, por 107.744.000 dólares.
El organismo sanitario certificó la exportación de 56.027 toneladas de menudencias y vísceras, por 32.185.000 dólares.
Los cortes Hilton exportados a partir del 1 de febrero tuvieron por destino a Alemania, 22.392 toneladas; Gran Bretaña, 12.503 toneladas; Holanda, 7.177 toneladas e Italia, 3.676 toneladas, entre otros. En el 2002, Egipto fue el primer importador de carnes frescas, con 32.697 toneladas. También desde febrero del 2002 se exportaron a Bulgaria 16.158 toneladas; al Brasil, 12.243 toneladas; a Israel, 9.321 toneladas; a Gran Bretaña 8.951, a Hong Kong, 2.960 toneladas y a Sudáfrica, 2.861 toneladas, entre otros mercados.
Fuente: Diario Rio Negro