El canciller de Uruguay, país que ostenta la presidencia pro témpore del bloque, explicó que en las semanas anteriores los otros tres miembros del Mercosur, Brasil, Argentina y Paraguay, dieron su visto bueno al respecto. "Esta decisión es fruto de negociaciones que comenzaron en julio. Hemos conversado mucho entre nosotros y elegimos esta cumbre para comunicar nuestro acuerdo", declaró, al margen de la XV Cumbre Iberoamericana de Salamanca.
"Es el deseo de Venezuela y el nuestro", corroboraron a la AFP fuentes diplomáticas brasileñas presentes en el encuentro de Salamanca.
Según Gargano, el ingreso venezolano supone que haya un impulso adicional para las negociaciones en curso con la UE.
"Nosotros necesitamos a la Unión Europea y ellos nos necesitan para que no haya unilateralismo y sí multilateralismo en el mundo", explicó.
Además, en opinión del canciller, este hecho dará una nueva dimensión al Mercosur, "que abarcará ahora desde el Caribe hasta la Tierra del Fuego", e implicará además y de forma indirecta que la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y el Mercosur "se unan en una misma asociación de libre comercio con una potencialidad formidable en el mundo".
Por su parte, el presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, se felicitó por la noticia, pero sostuvo en una rueda de prensa que el ingreso de Venezuela como miembro pleno al bloque sudamericano "complicará" las negociaciones en curso entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur para lograr un acuerdo de libre comercio.
"Esto complicará probablemente las negociaciones entre la UE y el Mercosur", declaró.