La empresa mendocina Platinum exporta una parte de los muebles que fabrica en Las Heras, a España, Chile y Bolivia. Voceros de Platinum confirman el crecimiento de su personal, en la división muebles: “de un plantel de 140 hombres se pasó a uno de 170 y persisten las perspectivas de crecimiento”. Y la firma EVG (Giuliani) coloca en Chile, Bolivia, Miami y Puerto Rico, muebles de oficina producidos en San Martín.
En tanto voceros de Domizi confirman aumentos en las ventas, la contratación de personal y la tecnificación de las líneas de máquinas, en los últimos tiempos.
Estos ejemplos muestran una de las principales características que presenta el sector mueblero mendocino: la de crecimiento en materia de ventas y de exportaciones.
Nuestra provincia es parte central de un proceso de avance exportador de muebles que abarca a una parte del país, principalmente a Buenos Aires, Mendoza, Córdoba y Santa Fe (en ese orden según la federación que aglutina a 20 cámaras del sector, Faima).
Del 98 al 2002 se exportaban 60 millones de pesos (a valor actual) y desde el 2002 al 2004 esta cifra se duplicó a 120 millones.
La historia de la industria nacional del mueble muestra muy claramente el recorrido económico del país: las importaciones nacionales habían crecido en la época de la apertura indiscriminada -entre 1998 y el año 2000- de 360 a 420 millones de pesos (actuales). Luego se derrumbaron entre el 2000 al 2002 de 420 a 30 millones de pesos actuales. Mientras tanto las exportaciones entre el 2002 y el 2004 crecieron desde 30 a 123 millones de pesos.
Plan estratégico
En el Instituto de Desarrollo Industrial, Tecnológico y de Servicios (Idits) confirman que “los primeros lineamientos que servirán para debatir el futuro Plan Estratégico sectorial, contienen acciones para mejorar la competitividad y para ampliar la frontera forestal de la provincia.
Y agregan que “recuperar y ampliar el mercado -tanto nacional como internacional- y mejorar la productividad del sector industrial e incrementar la oferta de materia prima, se plantean como objetivos centrales que deberá lograr el sector de madera y muebles de Mendoza, en los próximos años”.
El gerente del Idits, Carlos Daparo, confirma que “los primeros lineamientos -que serán luego debatidos por el sector en su conjunto para diseñar el futuro plan estratégico de la actividad- surgieron del trabajo que vienen desarrollando las comisiones técnicas, con la coordinación del instituto y la Universidad Nacional de Cuyo”.
Durante el Primer Foro Sectorial -que se llevó a cabo el año pasado- las propias empresas habían identificado como la debilidad esencial de la actividad el hecho de “plantear sus negocios desde la producción en lugar de direccionar sus estrategias a satisfacer las demandas del mercado, lo que venía comprometiendo seriamente sus condiciones de competitividad”.
Y al momento de caracterizar la cadena productiva “surgía claramente que sus posibilidades de expansión comercial se encontraban condicionadas, muchas veces, por las dificultades para garantizar la provisión de materia prima (en cantidad y calidad), por el nivel de utilización de la capacidad instalada y de gestión y, en definitiva, por su nivel de productividad”.
Objetivos
En el sector se prevén algunas acciones inmediatas “como la elaboración de estudios de mercado y un fuerte proceso de capacitación en estrategias de comercialización, junto con una importante campaña de promoción de productos”.
El trabajo preliminar que deberá discutir y validar el sector prevé, desde ahora hasta el año 2014, “una serie de acciones estratégicas tendientes a resolver las debilidades que, en este sentido, acusa la industria maderera. Entre ellas, la capacitación a nivel gerencial, la implementación de sistemas de calidad, el desarrollo de alianzas estratégicas y procesos de integración entre las empresas del sector especialmente las menor envergadura) y la incorporación de tecnología y procesos innovadores que permitan reducir costos e incrementar la producción”. Y se señala, también “la necesidad de mejorar las condiciones financiamiento como una herramienta importante en el despegue competitivo”.
Tecnología
A pesar del crecimiento exportador, el sector muestra un fuerte déficit tecnológico. El último Censo Industrial Provincial sobre tecnología muestra al sector maderero entre las más desactualizadas de la industria de Mendoza. “El problema se origina en razones de tipo financiero, pero también en el hecho de que muchas empresas tienen tendencia a incorporar equipos sin un sentido planificado de la producción, lo que produce capacidad ociosa y mucho tiempo de desuso en muchos casos", afirma. Y agrega que "la tecnología de punta no tiene financiamiento adaptado al nivel de las empresas que participan del sector. Mecanismos alternativos, como el leasing no se aplican. La investigación, el desarrollo y el diseño en las empresas del sector no tienen prácticamente ningún espacio. En general las soluciones relacionadas con el diseño se generan en profesionales independientes, que son los que verdaderamente sondean y desarrollan el mercado”.
Fuente Diario Los Andes