La Cadena Agroindustrial Argentina, integrada por más de 40 entidades de la producción, la industria y el comercio del agro, reclamó la eliminación de las retenciones a las exportaciones agropecuarias y el impuesto al cheque, en su propuesta para el reordenamiento de la estructura tributaria nacional presentada en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires. “Las retenciones a las exportaciones agropecuarias y el impuesto a los créditos y débitos bancarios son tributos discriminatorios y distorsivos”, manifestó Raúl Dente, asesor de los Acopiadores de Granos en la presentación del documento elaborado por los técnicos de las entidades que lleva por título Lineamientos de la política tributaria.

La propuesta “no supone cambios inmediatos, sino la eliminación gradual y paulatina, pero con calendario cierto, de estos impuestos que son discriminatorios, porque establecen precios relativos diferentes para los distintos sectores”, puntualizó el especialista.

Los empresarios reclamaron también que “los reintegros a las exportaciones sean verdaderamente devoluciones de impuestos directos” y limitar el uso de “aranceles y restricciones a las importaciones” a la “protección efectiva” de sectores determinados, preservando el esquema de una “economía abierta, competitiva, y previsible, sujeta a reglas estables que eviten la discrecionalidad de los funcionarios de turno”.

El documento es “un aporte para diseñar una política tributaria equitativa, justa y razonable”, y demuestra que la “Cadena no es un grupo de presión sino de opinión con propuestas que no buscan ventajas sectoriales sino el binestar general del país”, dijo Luciano Miguens, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), en el acto de presentación.

También el titular de la Bolsa de Comercio de Rosario, Roberto Boglione, señaló que la propuesta “es un gran trabajo que nos proyecta hacia el futuro”, y señaló que “las retenciones consumen la rentabilidad de las economías regionales” y precipitan el despoblamiento de las áreas rurales que “crean la necesidad de implementar planes sociales para atender la miseria”.

En respuesta a la afirmación de que las retenciones sirven para mantener un dólar alto para favorecer las exportaciones, Dente dijo que en soja “representan una quita del 23,5 % sobre el valor final, lo que sumado al costo de los insumos importados, encarecidos por el mismo dólar alto, deja un cambio de 0,90 dólar por cada peso”. En cuanto al “maíz y trigo, directamente consumen la rentabilidad de los cultivos”, puntualizó.

La propuesta plantea también rebajar la alícuota del IVA, eliminar el Impuesto a la Ganancia Mínima Presunta y a los Bienes Personales y la “simplificación del sistema” de percepción para mejorar la eficiencia y evitar la inequidad que fomenta la evasión.