Fuentes del sector destacaron la importancia de la promoción y de la marca país. Con el vino fino fraccionado como carta de presentación, las exportaciones del sector vitivinícola -incluidas las de mosto- crecieron un 17,5 por ciento en volumen en el primer trimestre del año, mientras que los ingresos, tuvieron un alza de un 38,2 por ciento. Tal como sucedió en los últimos años, Peñaflor encabezó en el primer trimestre de 2005 el ranking de bodegas exportadoras de vino, en un contexto internacional favorable donde los establecimientos vieron crecer sus ingresos un 33,9 por ciento.
Así se desprende de un informe de la empresa local Caucasia elaborado sobre la base de datos de los despachos registrados por la Aduana.
Fuentes del sector indicaron que si bien el alza en las exportaciones de vino -sin incluir el mosto- fue menor que la del primer trimestre de 2004 -cuando crecieron un 37,1 por ciento respecto del mismo período de 2003-, las bodegas continúan absolutamente focalizadas en el mercado externo, ya que las ventas dentro de la Argentina aún no reaccionan.
El informe de Caucasia indica que en los primeros tres meses del año se vendieron al exterior 36.692.069 litros de productos vínicos (que incluye vinos finos y de mesa, espumantes y granel) por un valor de US$ 57.710.782.
La mayor parte de las operaciones al exterior de este año correspondió a vino fino fraccionado (59 por ciento), seguido por mosto concentrado de uva (31 por ciento), vino a granel (5 por ciento) vino básico fraccionado (4%) y espumantes (1%). Las exportaciones de mosto alcanzaron los 19.980.327 litros.
Peñaflor, primera
Con operaciones por 7.147.474 dólares realizadas entre enero y marzo pasados, la centenaria bodega mendocina Peñaflor amplió sus ventas un 43,7 por ciento respecto de igual período de 2004, cuando exportó US$ 4.972.186. El segundo lugar del escalafón de bodegas exportadoras lo ocupó Bodegas Esmeralda -del grupo Catena-, con ventas por US$ 5.092.082 en el trimestre, lo que representó una suba de un 37,7 por ciento.
Detrás de Esmeralda se ubicó Trivento, del grupo chileno Concha y Toro, con US$ 3.296.797, es decir, un 50,6% más que en el primer trimestre del año anterior. Norton obtuvo US$ 2.975.387 producto de sus ventas fronteras fuera del país, y mantuvo de esa forma el mismo nivel de operaciones respecto del primer trimestre de 2004. Así se situó en el cuarto lugar, seguido por el grupo BVA SA (jugos Baggio), que facturó US$ 2.551.879. Esta bodega logró un récord de crecimiento de sus exportaciones (157,7%) frente a los US$ 990.225 que exportó en el primer trimestre de 2004. En la lista de bodegas que más presencia internacional tuvieron entre enero y marzo pasados también lograron posicionarse, aunque más atrás, Fecovita, Chandón, La Agrícola, RPB y Flichman.
María Inés González, de Finca Flichman, dijo que "el crecimiento global es muy bueno". En este sentido, destacó la tarea que está desarrollando Wines of Argentina (WOFA), el organismo que promociona el vino argentino en el exterior. "Está trabajando muy fuerte con campañas de promoción y en la marca país -indicó González-, que ayuda muchísimo para la venta del vino. Va a influir en las ventas y en la apertura de mercados afuera.
Fuente Diario La Nación