La industria curtidora argentina luce cada día más joven, aunque sus inicios se remonten a los tiempos del miriñaque, y la pyme Patagonia Exotic Leather (PEL) es una de las principales responsables. A sólo un año y medio de su creación, logró exportar a las capitales de la moda mundial (Londres, Milán y París) sus novedosos cueros de pescado (carpios y alosas), de cabras andinas, de carpinchos, de suríes y de iguanas, entre otros.
El emprendimiento fue creado por Aldo Espósito, que también es dueño de la curtidora Antonio Espósito SA -con 100 años de funcionamiento en el país-; Sergio Bagcheian, un empresario con larga experiencia en el sector del calzado y la indumentaria; Eduardo Cassullo, ex director de la Aduana y ex ejecutivo del grupo Techint, y por el maestro curtidor Jorge Costamagna.
Estudio de mercado
"Primero hicimos con Eduardo [Cassullo] un rastreo de dos años por todo el país de especies argentinas cuya carne estaba explotada, pero no su cuero. Luego se sumó Aldo [Espósito] con todo su potencial industrial y se realizó una inversión muy importante en el desarrollo del producto", dijo Bagcheian, vicepresidente de PEL.
Por su parte, Cassullo, director de la empresa, destacó que los cueros exóticos -que requirieron del desarrollo y la estandarización de cuidadosos procesos industriales de curtido, diferentes en cada caso- son "ecológicos y éticos" porque provienen de animales de criadero y destinados al consumo humano. "Somos los únicos que podemos vender cuero de la Patagonia, que es una marca mundial -añadió-. Uno dice Patagonia, y el consumidor piensa en un desierto, en pesca con mosca y en aire puro."
Lo cierto es que la originalidad de su oferta, la variedad de los colores y las innovadoras texturas ya tentó a los diseñadores top nacionales e internacionales. De hecho, ya se ven calzados elaborados con cuero de pescado exportado por PEL en las codiciadas vidrieras de la Vía Montenapoleone, en Milán, donde un par de zapatos de mujer puede costar 900 euros (casi 4000 pesos).
Además, la firma suscribió "una alianza creativa" con Martín Churba y con la empresa Puma, para la creación de indumentaria y de audaces modelos de calzado deportivo con proyección internacional. Con el reconocido diseñador argentino desarrolló un cuero de pescado con laminado de oro que está llamado a ser la vedette de la nueva línea de productos. La presentación en sociedad se realizó la semana última en la 9° Fashion Buenos Aires, en la Sociedad Rural, durante un encuentro con 2500 invitados.
Los cueros de pescado "tridimensionales" (aparentan tener profundidad gracias al tratamiento especial de las escamas) y los paneles de cuero magnéticos son las grandes sorpresas. En este último caso, se trata un desarrollo de Antonio Espósito SA patentado en 120 países, cuya comercialización está a cargo de PEL.
Los paneles se colocan sobre planchas metálicas y permiten decorar interiores (pisos y paredes) en un abrir y cerrar de ojos. La empresa ya vendió en Londres los primeros metros de este material, realizado en base a cuero vacuno, que es muy resistente y puede ser fácilmente reinstalable en otro ambiente en caso de mudanzas.
Gracias a la versatilidad de este sistema, "un hotel de Calafate va a poder vestir su lounge de acuerdo al color cambiante del parque, en cada estación del año", adelantó Bagcheian.
Por estos días, la agenda de los cuatro socios tendrá un plato fuerte: la feria Le Cuir à Paris, que se desarrollará esta semana en la capital francesa y en la que se esperan 40.000 visitantes. La pyme argentina -que está comenzando a incursionar en el mercado norteamericano y prevé hacerlo en breve en Turquía, China, Nueva Zelanda y Australia-, tendrá un stand propio en ese encuentro de negocios.
Por Leandro Uría
Fuente Diario La Nación