Brasil advierte que seguirá en el ALCA hasta donde le convenga
Brasil continuará en las negociaciones para la creación del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) mientras convengan a los intereses del país, advirtió el ministro brasileño de Desarrollo, Industria y Comercio, Sergio Amaral. "Tendremos condiciones de frenar el tren en caso de que los beneficios no sean compatibles con las concesiones", afirmó Amaral en un artículo que escribió para la edición de hoy del diario "Folha de Sao Paulo".
En su artículo, el ministro considera el ALCA como un tren que ya partió, cuya estación final es la integración continental y que avanza impulsado por la locomotora de Estados Unidos. Considera, sin embargo, que algunos vagones no llegarán hasta la meta.
El ALCA, una iniciativa estadounidense y cuyas negociaciones son presididas actualmente por Estados Unidos y Brasil, prevé la creación a partir del 2005 de una zona de libre comercio entre Alaska y Tierra del Fuego, excluyendo únicamente a Cuba.
"Si el resultado (de las negociaciones) atiende nuestros intereses, podremos participar. Si no, nada nos obliga a suscribir un acuerdo insatisfactorio", afirmó Amaral.
El ministro considera que Brasil puede sustituir el ALCA por la red que está tejiendo actualmente de "asociaciones comerciales, empresariales y de inversiones" con sus "vecinos", y "el incremento del intercambio con nuevos socios y de alto potencial como China, India y Rusia".
Entre los asuntos que pueden amenazar la participación de Brasil en el proceso de integración hemisférica, el ministro cita las negociaciones agrícolas que, explica, están condicionadas a avances en la Organización Mundial del Comercio (OMC) y que, a su vez, dependen de que la Unión Europea (UE) reforme su Política Agrícola Común, y desmonte los subsidios.
Amaral también cita las posibles intervenciones del Congreso de los Estados Unidos en las negociaciones sobre productos sensibles.
"Para nosotros, los riegos de la negociación son básicamente dos: primero la eventualidad de desequilibrio en los resultados, debido a que el cronograma prevé el inicio de la negociación sustantiva sobre acceso a mercados en julio próximo, pero deja para después las negociaciones sobre temas agrícolas y defensa comercial, que son los que más nos interesan", considera el funcionario.
El segundo riesgo -agrega- es la posibilidad de que Estados Unidos promueva una división de las negociaciones y firme acuerdos "primero con Chile, después con los centroamericanos y los caribeños y en seguida con los andinos, y deje por último y aislado al Mercosur".
Amaral explicó que, como a Brasil no le conviene quedarse aislado al final de las negociaciones, ya negoció acuerdos de preferencias arancelarias con Chile y con México, y promueve un acuerdo amplio entre el Mercosur y la Comunidad Andina de Naciones (CAN) que puede ser firmado este mismo año.
El ministro considera que, con la Unión Europea y los países asiáticos encerrándose en sus áreas, será difícil para Brasil quedarse afuera del ALCA.
"El camino más sensato, por lo mismo, parecer ser el de seguir aumentando la competitividad de nuestros productos y el de asumir el liderazgo de las negociaciones del ALCA. Prepararnos adecuadamente para negociar con firmeza y hasta intransigencia", concluye.
Fuente: Agencia EFE