Las PyMEs aumentaron 40% su volumen de envíos al exterior, aunque todavía tienen escasa participación. Tanto la salida de la convertibilidad como el contexto internacional por demás favorable, acrecentaron las posibilidades de inserción de los productos nacionales en el comercio internacional. Esto permite entender por qué las exportaciones argentinas cerrarían el 2004 con un nivel 25,9% superior al de 2001 y 13,3% mayor al de 2003, transformándose de esa manera en récord histórico, de acuerdo a un estudio presentado por el Centro de Estudios Bonaerenses.
“De todas maneras –indica el informe- debe rescatarse que este comportamiento ascendente en el flujo de envíos no fue homogéneo de acuerdo al tamaño de las empresas . Teniendo en cuenta la clasificación en micro, pequeñas, medianas-chicas, mediana-grandes y grandes empresas exportadoras, se encontró que en el período 2001-2003 las que se vieron más perjudicadas fueron las de tamaño mediano, ya que las ventas consolidadas de las empresas de este grupo prácticamente no mostraron variación en el período considerado.
Mientras que las empresas grandes expandieron su comercio un 4%, las pequeñas aproximadamente un 10% y las más chicas, esto es, las que venden menos de u$s 20.000 al año en el exterior, lo hicieron en casi un 40%”.
¿Qué pasa en el 2004?
En los primeros ocho meses de 2004, el 92,2% de las exportaciones argentinas se originó en alguna de las 984 empresas grandes que vendieron al exterior en ese período, mientras que sólo el restante 7,8% corresponde a firmas micro, pequeñas, medianas-chicas y medianas-grandes, que el informe denomina “ PyMEx (pequeñas y medianas empresas exportadoras)”.
La estructura por destinos de las exportaciones muestra una importante diferencia con relación al tamaño de las empresas: para las más grandes, la distancia no parece ser un escollo a la hora de vender sus productos, observándose en este caso la mayor diversificación.
El principal destino es Asia, que concentra el 22,1% de los envíos, fundamentalmente por la influencia de China (explica casi el 10% de las ventas), mientras que a Europa se destina el 21,1% de los productos, y al Mercosur el 17,6%.
“Para las empresas PyMEx, cobra importancia el mercado regional, dados los menores costos en logística y transporte que los envíos a éste implican, así como también las mayores probabilidades de un comportamiento competitivo en este ámbito”, indica el trabajo. “Para estas empresas –continúa- el mercado más significativo es el sudamericano, que concentra el 53% de los envíos (de los cuales 29 puntos porcentuales corresponden al Mercosur y los restantes 24 puntos a los demás países de América del Sur). Para las empresas pequeñas (micro y pequeñas exportadoras) Chile es el destino más importante, concentrando el 16,4% de sus ventas”.
El estudio económico destaca que “el continente europeo presenta la particularidad de mantenerse como un destino importante para todos los tamaños de empresa analizado, recepcionando un máximo de 24,3% para las empresas grandes y un mínimo de 18,0% para las más chicas”.
El total de las ventas nacionales se reparte entre productos agrícola-ganaderos y derivados (52,5%) y productos industriales (47,5%), proporciones similares a las observadas para las grandes empresas.
En este sentido, el fuerte peso de los productos agrícola-ganaderos en las ventas externas de las empresas de mayor tamaño se explica por las exportaciones del complejo oleaginoso, las más significativas con respecto al total, las cuales están concentradas en grandes empresas.
Fuente Diario La Mañana de Córdoba