El cultivo del blueberry se desarrolla en 185 hectáreas. Inauguraron una planta procesadora de la fruta. Toda la producción de la provincia se exportará a Europa. El sector está en expansión y se estima que en 2006 producirá 1,5 millón de kilos de arándanos.
El gobernador José Alperovich dejó formalmente inaugurada la cosecha de arándanos 2004, en el paraje La Florida, de La Invernada. En la ocasión también habilitó una moderna planta procesadora de esa fruta perteneciente a la firma Sucesores de Salomón Jalil.
“Tucumán va a ser arándano, y esto abre una gran perspectiva para nuestra economía. Muchos productores se dedicarán a esta actividad porque es un buen negocio. Nosotros vamos a ayudarlos”, dijo el primer mandatario.
Este año, nuestra provincia alcanzó un área de cultivo de 185 hectáreas, y hasta 2006 el sector prevé desarrollar 500 hectáreas en total, las que representarán una producción de 1,5 millón de kilos. Al país le generará un ingreso de divisas cercano a los 15 millones de dólares. Toda la cosecha, incluida la de esta campaña, será destinada a Estados Unidos, Japón, Inglaterra, Holanda, Francia y España, países de mayor consumo. Tucumán, al ser productora de contraestación, se convierte durante octubre en la única proveedora de ese fruto a nivel mundial. Este hecho la favorece en demanda y precio.
La superficie de arándanos cultivados en la Argentina asciende a 2.000 hectáreas, y debido a la gran demanda de plantines que existe en la actualidad, se estima que en dos años se desarrollarán 3.500 hectáreas.
La firma Jalil es la segunda empresa tucumana que se lanza a conquistar el mercado mundial de arándano. En ese afán formalizó una alianza estratégica con la empresa comercializadora Tecnovital SA y con Tecnoplant SA, proveedora de plantines, ambas integrantes del grupo Bio Sidus, de Chile.
La planta procesadora, que dispone de empaque, dos cámaras de mantenimiento y dos túneles de frío, les demandó una inversión de 600.000 dólares. En el acto de inauguración de la planta procesadora de arándanos estuvieron presentes Ricardo Baya, gerente de comercialización de Tecnovital; el gerente financiero del grupo Sidus, Marcelo Burnstein, y los titulares de Sucesores de Salomón Jalil, Antonio y José Jalil.
Fuente La Gaceta de Tucumán