Ya está en mercados como el de Estados Unidos, Chile y Uruguay y aspira a entrar en Asia y los países del Este europeo.La famosa premisa económica de pasar de exportar commodities a productos con valor agregado fue llevada a un extremo por esta firma, que importa café y luego lo exporta, ya procesado. Al igual que alguna vez lo hizo Gran Bretaña con Argentina con el té -compraba aquí las hierbas y luego las revendía ya elaboradas-, esta operatoria no sólo se está realizando con países no productores como Estados Unidos, Chile y Panamá, sino también con productores, como Bolivia.

Hace cuatro años que la firma "Cabrales" incursiona en la exportación. Hasta fines de 2001, sin embargo, los únicos productos con que trabajaba eran hierbas, cuya materia prima se adquiere en Argentina.

Fue este año, a partir de la devaluación, que la tradicional firma marplatense -por naturaleza importadora- decidió encarar una operatoria aún más arriesgada: exportar café fino, para lo cual debía previamente importar los granos.

Y le salió bien. Los primeros contenedores partieron en abril hacia Chile, pero no tardaron en sumarse otros hacia Uruguay, Panamá, Bolivia y Estados Unidos -en los estados de La Florida y Nueva York-.

Hoy las exportaciones -no sólo de café- representan el 10% de la operatoria total de Cabrales, con buenas perspectivas de ampliarse el año próximo.

- Tras la devaluación
"Dentro del desastre que fue la devaluación, principalmente en lo que hace al mercado interno, nosotros pudimos ver la luz con las exportaciones" se sinceró Marcos Cabrales, directivo de la firma.

El empresario explicó que la exportación de café es posible "gracias a que la caída de la paridad 1 a 1 nos dejó en una posición inmejorable desde el punto de vista de los precios, a lo que sumamos un desarrollo de calidad exclusivo en materia de café express y gastronómico".

Añadió que la firma adquiere los granos de café en distintos países pero principalmente en Brasil. "Ser vecinos del principal productor mundial de café nos ayudó enormemente", dijo.

También explicó que el producto se elabora en las plantas que Cabrales posee en el Parque Industrial "General Savio" de Mar del Plata, poseedoras de los certificados de calidad internacionales ISO 9002 y HACCP, lo cual fue considerado como "un punto muy favorable" por el empresario.

Por otra parte Cabrales explicó que prácticamente no existen barreras arancelarias para el comercio internacional de café, dado que la mayoría de los países no son productores. "Esto también nos facilita la operatoria", dijo.

En cuanto a la falta de financiamiento -traba con que se encontraron muchos aspirantes a exportadores tras la devaluación-, el empresario explicó que "afortunadamente este año encontró a nuestra firma saneada, sin grandes deudas, por lo que pudo encarar su expansión sin ayuda externa".

En este marco, aclaró que "en lo único que nos perjudica (la falta de crédito) es en que no podemos trasladar la financiación a nuestros clientes en la medida que quisiéramos".

- Beneficios del exilio
La gran cantidad de argentinos en general y marplatenses en particular radicados en el exterior posibilitó la entrada del café de Cabrales en mercados antes impensados, como Nueva York.
"Cuando el argentino está afuera busca las marcas que consumía en su país, tanto en el café como en la yerba, el dulce de leche o los lácteos" enfatizó Cabrales.

Relató que a Estados Unidos "entramos primero por La Florida, donde hay muchísimos argentinos, y ahora estamos en Nueva York, donde para nuestra sorpresa también hay radicado un número importante de connacionales". No obstante, el empresario aclaró que "ahora que entramos también estamos ganando a los consumidores no argentinos".

Una prueba de lo anterior es que el próximo paso que piensa dar la firma es entrar a países donde prácticamente no hay argentinos, como los de Europa del Este o los asiáticos.

Fuente: Diario La Capital, Mar del Plata.