La industria del software de Mendoza se prepara para posicionar su oferta en el mundo. Desde hace un mes siete empresas trabajan en un proyecto de asociatividad, junto a la Fundación ProMendoza, para exportar sus productos. Incluso hay un desafío mayor: realizar trabajos entre varias firmas para abastecer a un mismo cliente en el exterior.
“Si bien el programa tiene una duración de 14 meses, prevemos que alrededor del cuarto mes puede aparecer la primera exportación del grupo”, explicó Juan del Bono de ProMendoza.
El proyecto cuenta con cuatro etapas: análisis de cada integrante del grupo, capacitación, elaboración del plan de exportación y -finalmente- ejecución de las ventas.
Entre las principales ventajas competitivas con que hoy cuenta la industria del software local se destaca la gran cantidad y calidad de los profesionales y el tipo de cambio favorable.
Hay que resaltar que durante 2003, a nivel nacional, se exportaron productos de software por US$ 170 millones. Y se espera superar los US$ 400 millones en 2006.
Los que ya exportaron
Varias de las empresas de tecnología de Mendoza ya han realizado exportaciones en forma individual. En la mayoría de estos casos el destino elegido fue Chile, una buena opción para las primeras ventas externas.
Desde SEIN Argentina SA explican que ya han concretado ventas de software a Chile. “En este momento tenemos una gran ventaja competitiva, a raíz del tipo de cambio, aunque también hay que reconocer que los profesiones egresan de las universidades con muy buen nivel”, dice Javier Irisarri, miembro de la empresa.
Milventas Argentina SRL, por su lado, también ha realizado ventas en el exterior. “Estamos vendiendo software en Chile”, explicó Fernando Castro, gerente general de la firma de tecnología que en este momento se encuentra trabajando en el desarrollo de productos para aplicar en forma específica a la trazabilidad.
Belatrix SA es una empresa de desarrollo de software de Mendoza que comercializa sus productos sólo en Estados Unidos. “Todo esto sale porque mi hijo, Alejandro, se fue a vivir a EEUU”, comenta Luis Robbio, quien dirige la firma en la provincia.
Robbio rescata que existen varias barreras de ingreso a los mercados mundiales. Entre ellos destaca el idioma y la falta de confianza que ostenta la Argentina en el exterior. “La imagen para nosotros es una barrera complicada, porque estamos vendiendo servicios, lo que es un intangible, por lo que necesitamos que los clientes depositen una gran confianza en nosotros”.
Sílice SA es otra de las empresas que, entre sus servicios, elabora software en la provincia y que tiene grandes expectativas de colocar sus productos en el exterior. “Hoy uno de los principales objetivos de la industria local en su conjunto es exportar. Y en este sentido, el mayor desafío pasa por ver primero qué posibilidades reales de asociatividad existen entre las empresas, una condición fundamental para abarcar mercados mundiales”, sostuvo Daniel Caselles, presidente de la firma.
Power Solution es una firma local que está muy abocada al mercado interno. No obstante, tienen previsto exportar. “Nos interesaría poder exportar. Las perspectivas para poder hacerlo son buenas, teniendo en cuenta el nivel de nuestros profesionales y el tipo de cambio actual”, dijo Gustavo Giordano, director ejecutivo de la empresa.
Al hablar de barreras de ingreso a otros mercados, Giordano remarca que una de las principales limitantes a la hora de pensar en exportar, está dada por “el costo que implicaría armar un plan de inserción en el exterior dado que en el software no hay canales de comercialización armados como ocurre en otros productos mendocinos”.
Desde Dipros, otro de los jugadores locales, aseguran que están ajustando su estructura para comenzar a ofrecer su software en el exterior.
Francisco Bravo, presidente del directorio de Dipros, sostiene que existen grandes ventajas competitivas para exportar productos, aunque es consciente de algunas barreras: “Una de las principales es la inversión. Hay que tener en cuenta que los proyectos de desarrollo hay que encararlos a largo plazo, por lo que tienen largos tiempos de recuperación de la inversión”.
Fortalecimiento interno
El proyecto que prevé lanzar al mundo la oferta exportable de software de Mendoza aparece en un momento donde la industria está en un proceso de fortalecimiento interno, además de haber recibido el apoyo del sector público.
Sucede que a nivel nacional se acaba de promulgar una ley de promoción para la industria del software, mientras que en Mendoza se avanza en la constitución del Consejo Profesional de Informática y en una red universitaria, la que estaría conformada por miembros de las ocho instituciones que en la provincia tienen carreras relacionadas a la tecnología (Universidad de Mendoza, Champagnat, Maza, San Francisco, Aconcagua, ITU y UTN).
“Creo que después del golpe que significó la crisis de 2001 aprendimos que trabajando en equipo podemos hacer más cosas que solos”, agregó Daniel Caselles, quien además de empresario es vicepresidente de la Cámara de Empresas de Tecnología de Mendoza (Catem).
Por otra parte, la industria del software se está consolidando también en el mercado interno. “Venimos viendo un crecimiento desde hace un par de meses. Las empresas locales, cada vez más, se están decidiendo a invertir en tecnología”, aseguró Irisarri.
Por Germán Sala
Fuente Diario Los Andes