China ha aprobado las últimas enmiendas a su Ley de Comercio Exterior para adaptarse a las exigencias derivadas de su ingreso en la Organización Mundial del Comercio (OMC), informaron hoy fuentes del Ministerio de Comercio. Esta ley "potenciará el desarrollo en comercio internacional y de la economía de mercado, la aplicación de las promesas ante la OMC y el imperio de la ley", declaró el viceministro de Comercio.
La aprobación de la definitiva Ley de Comercio Exterior, que entrará en vigor el 1 de julio, culmina un proceso de revisión de las normas comerciales que ha durado dos años, y pone a China "en línea" con los requisitos de la OMC, según las autoridades.
Los principales cambios que introduce la ley son el fin del monopolio estatal para el comercio de ciertos productos como el petróleo, grano, fertilizantes químicos, algodón, azúcar y aceite, anunció Huang Jianchu, miembro de la comisión de asuntos legales del Comité Permanente de la Asamblea Nacional Popular china, que aprobó la norma anoche.
Bajo la nueva ley, cualquier persona podrá hacer operaciones de comercio internacional, y los operadores extranjeros podrán importar y exportar bienes y tecnología sin necesidad de una autorización previa.
La normativa también incluye cláusulas sobre cómo las empresas nacionales pueden utilizar los mecanismos de defensa comercial, como las denuncias contra comercio desleal y contra subsidios, en el marco de la OMC, y prevé mayor protección para la propiedad intelectual.
Establece además un sistema de "alerta temprana", un servicio de información al público, datos estadísticos y mayor transparencia sobre actividades ilícitas, que serán castigadas con mucha más dureza de ahora en adelante.
La nueva ley no ha provocado, de momento, reacciones por parte de las cámaras de comercio extranjeras en Pekín, quienes habían sido consultadas en enero sobre el proyecto de enmiendas a la ley.
"Estamos esperando el texto completo de la ley para ver si los intereses de las empresas europeas han sido tenidos en cuenta", declararon fuentes de la Comisión Europea en Pekín, que no quisieron especular sobre el impacto de la nueva norma.
El rápido desarrollo de la economía china en las últimas décadas ha sido posible en gran parte gracias a la inversión extranjera y el comercio internacional, cuyo volumen total en el año 2003 ascendió a 850.000 millones de dólares estadounidenses.
Fuente Agencia EFE