La tecnología española tiene un nivel muy elevado en muchos sectores. Pero no se conoce. Una vez más, nuestra industria choca con la falta de una imagen país que sirva de soporte a la internacionalización de nuestras empresas.
El Plan de Internacionalización de la Tecnología es una iniciativa del ICEX dirigida a intensificar el apoyo a los sectores y empresas con alto contenido tecnológico. Se propone además reforzar la imagen internacional de España y del made in Spain en el ámbito tecnológico e industrial.
Pedro Mejía, secretario de Estado de Turismo y Comercio, destaca, por encima de todo, “el compromiso de la Administración comercial española con este doble objetivo, que se plasma en la asignación presupuestaria del Plan de Internacionalización de la Tecnología: 100 millones de euros para el período 2005-2007. El gasto en 2005, primer año de ejecución del plan, se elevó a unos 43 millones de euros”.
Con este plan, el Instituto pretende que nuestro país sea percibido como lo que realmente es: líder en algunos sectores y de nivel medio elevado en muchos otros.
España es el segundo productor mundial de energía eólica, sólo superada por Alemania, por delante de Estados Unidos, y los primeros operadores mundiales de parques eólicos son españoles. Es también el primer país industrializado en sistemas de producción de agua desalada.
Cabe destacar además que nuestra oferta tecnológica incluye, entre otros hitos, a seis de las diez empresas con mayor número de concesiones de infraestructuras de transporte del mundo.
Nuestra oferta tecnológica es responsable también de proyectos como el ferrocarril Heathrow Express en el Reino Unido o los metros de Washington y México DF; gestiona los aeropuertos de Sidney, Estocolmo y Orlando; aporta el mayor parque tecnológico aeronáutico de Europa, Aerópolis, que se encuentra en Sevilla; y es líder europeo en sistemas de control de tráfico aéreo.
Sectores con tecnología
Los sectores a los que se dirige el plan son aquellos de intensidad tecnológica alta o media alta, agrupados en torno a cuatro grandes áreas de actuación:
– energía y medio ambiente,
– infraestructuras de transporte,
– tecnología industrial,
– telecomunicaciones y tecnologías de la información.
Mercados prioritarios
Hay una serie de mercados que la Administración comercial española ha considerado con alto potencial de crecimiento, en los que la participación de la tecnología española es reducida con relación a sus verdaderas posibilidades de penetración.
El primero de ellos es el de Estados Unidos. El segundo, Japón. El tercero no puede ser otro que China, “un país emergente que ha transformado radicalmente el funcionamiento de la economía global en estos últimos años y que, por tanto, es muy importante para España”, destaca Ángel Martín Acebes, vicepresidente ejecutivo del ICEX.
En cuarta posición se sitúa la India. Otros países de gran importancia para España son México, Brasil, Marruecos, Argelia y Rusia.
Además de los mercados multilaterales, existen también mercados estratégicos de oportunidad para sectores específicos, como es el caso de Polonia, en donde se desarrollan interesantes proyectos de infraestructuras. “Y también de otros países de Europa del Este”, enfatiza Martín Acebes, “donde existen oportunidades en un área a la que queremos dar gran importancia dentro del plan de la tecnología, que es la utilización de los fondos europeos, especialmente en los proyectos de infraestructuras”. El Exportador Digital
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