El Plan de Internacionalización contempla grandes líneas de acción para impulsar la promoción, la creación de imagen de Castilla-La Mancha, la potenciación de la red exterior regional, la formación de recursos humanos, la cercanía a las empresas, incrementar la colaboración institucional y una política proactiva en la captación de inversiones.
Conseguir que, en el marco del Pacto por el Desarrollo y Competitividad, nuestra economía se adapte al nuevo
contexto económico mundial y que nuestras empresas encuentren todas las facilidades para posicionar sus productos y servicio en el cada vez más competitivo mercado exterior” es el principal fin de ese Plan de Díaz-Salazar.
El Plan de Internacionalización 2006-2010, que ha empezado a ejecutar el Instituto de Promoción Exterior (IPEX), contempla grandes líneas estratégicas para cuya ejecución se han presupuestado 41 millones de euros en este período.
Junto a la dotación económica, Díaz-Salazar ha destacado algunas cuestiones primordiales del Plan: los sectores beneficiarios, su apego a la realidad regional, la explotación de nuevos sectores como el español como recurso económico, su complementariedad y coordinación con las demás instituciones y el consenso del que nace.
Por otro lado, el Plan atiende a todas las fases del proceso de internacionalización, desde la iniciación a la consolidación, la implantación y la diversificación de mercados y atiende a las nuevas exigencias del mercado.
El Plan de Internacionalización nace del consenso y ha sido aprobado por el Consejo de Administración del IPEX en el que están representados las Cámaras Oficiales de Comercio e Industria de la Región, la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (CECAM) y la Unión de Cooperativas Agrarias de Castilla-La Mancha (UCAMAN), además de las Consejerías de Industria y Tecnología y Agricultura.
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