En tan sólo tres años, 2.500 empresas de Castilla y León, en su mayoría PyMEs, han cruzado las fronteras españolas con sus productos para venderlos en el exterior y fijar alianzas comerciales con empresas foráneas.
El Plan de Internacionalización que arrancó en 2004 ha servido para que las empresas castellano y leonesas se abran a nuevos mercados y ya son 3.100 las que tienen negocios en el exterior (50 países), según informó ayer el consejero de Economía, Tomás Villanueva, tras la reunión que mantuvo con el presidente del Consejo Regional de Cámaras de Comercio, Manuel Vidal, y la delegada del Instituto de Comercio Exterior (ICEX), Isabel Clavero, para fijar la estrategia de cara a los próximos cuatro años.
Se trata del II Plan que tratará, fundamentalmente, de consolidar a las empresas que ya tienen presencia exterior: “Ya no se trata tanto de que haya más empresas exportadoras, sino de que las que ya lo son aumenten su volumen de negocio y se consoliden”, explicó Clavero.
Para conseguir este objetivo, Villanueva puso tres condiciones indispensables: aumentar el tamaño de las empresas, innovación (ofrecer productos diferentes y de calidad) y fijar alianzas para tener un mayor mercado.
Entre los sectores que más futuro tienen en el exterior, el consejero de Economía destacó el textil y el español como recurso económico, sin olvidar las energías renovables, la piedra, el mueble y las tecnologías de la información. En este sentido, mostró su confianza en que otros, como la agroindustria y los servicios, tengan cada vez más presencia en el exterior. Unos productos que a partir de ahora tendrán que empezar a venderse en países receptivos a este tipo de importaciones como Indica, Brasil o Portugal. No obstante, Villanueva destacó que existe un gran interés en que las empresas de Castilla y León fijen sus tentáculos en los territorios de la reciente ampliación de la Unión Europea, como Bulgaria y Rumanía.
Tanto Villanueva como Vidal y Clavero coincidieron en calificar el I Plan de Internacionalización de “exitoso” y por eso acordaron seguir con sus principales líneas. De hecho, según Villanueva, “no ha habido ninguna empresa que haya fracasado. Es un trabajo -explicó- de mucho tiempo, por eso ahora se trata de sembrar. Tanto es así que el consejero pronosticó que en una “década” Castilla y León “tendrá una economía más abierta y una internacionalización consolidada”.
Entre las estrategias de futuro, el II Plan de Internacionalización no contempla abrir nuevos centros de negocio en el extranjero, ya que con los actuales (Madrid, Varsovia, Budapest, Miami y Valladolid) son suficientes, según el titular de Economía, quien apostó, no obstante, por potenciar en el de la capital belga debido a la necesidad de tener más presencia en las instituciones europeas en el nuevo marco presupuestario.
El presidente del Consejo Regional de Cámaras de Comercio se mostró muy “contento” con el plan en vigor porque ha servido para “despertar la conciencia exportadora de nuestras empresas“, a la vez que recordó que hace tres años era una “utopía” alcanzar la cifra de 3.000 empresas con presencia en el extranjero que ahora se ha conseguido. “El siguiente paso es que éstas vendan más en el exterior“, remarcó Vidal.
Por su parte la directora de Icex en Castilla y León apostó por dar productos a las empresas extranjeras nuevas que demanden cosas nuevas y puso como ejemplo al sector tecnológico, actualmente en pleno auge en la Comunidad. EFE
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