El 70% de las PyMEs exportadoras de Aragón se ven afectadas por las nuevas reglas internacionales

El 70% de las pymes aragonesas utiliza los créditos documentarios para asegurarse cierta estabilidad en las operaciones de comercio exterior, según estimaciones de la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza. Pero ahora las reglas para este tipo de intercambios han cambiado, ya que desde el pasado domingo, 1 de julio, han entrado en vigor las UCP 600.
Estas Reglas y Usos Uniformes relativos a los Créditos Documentarios (UCP, por sus siglas en inglés) regulan las transacciones con cartas de crédito documentario en todo el mundo, afectando a todas las operaciones que utilicen este medio de pago.
Entre los principales cambios que conllevan las UPC 600 destacan la mejora en la redacción de los artículos, evitando malentendidos, y una disminución del número de artículos frente a las UPC 500 (de 49 artículos a 39). A las UCP 600 se les ha añadido además un artículo de definiciones para aclarar el significado de los principales elementos utilizados en los créditos documentarios, así como un aparatado de interpretaciones con las pautas a seguir para aplicar las reglas.

El periodo para que los bancos revisen los documentos de los créditos también se reduce también de 7 a 5 días. Respecto al transporte, se ha ampliado el concepto de “negociación” para las obligaciones de los bancos. También se han introducido artículos para la presentación conforme, las notificaciones, la designación y el tratamiento de los documentos originales y copias, entre otros cambios.

Los créditos documentarios son utilizados mayoritariamente por las pymes, evitándose así problemas al desconocer en muchas ocasiones la solvencia o las garantías que ofrece la otra parte implicada en la operación de negocio internacional. Las multinacionales, por su parte, se decantan por otras fórmulas de cobro y pago dada su envergadura y su capacidad de negociación.

Las UCP que regulan los créditos documentarios sirven como punto de referencia de los exportadores, importadores, bancos y empresas de transporte de todos los países. Creadas en 1933 para evitar la confusión en el comercio internacional por la aparición de distintas normativas nacionales, la Cámara de Comercio Internacional reguló de manera independiente las prácticas en los créditos documentarios. La última versión de estas reglas, las UCP 500, ha sido revisada tras trece años de vigencia y tras tres años de propuestas. Ahora se ponen en marcha las UCP 600.

La Cámara de Comercio Internacional es la portavoz de las Cámaras de Comercio de todo el mundo, a las cuales representa en las Naciones Unidas, el Banco Mundial o la Organización Mundial del Comercio, entre otras organizaciones internacionales.

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