Se depositaron 332.500 dólares en la cuenta del Comité de Comercialización, lo que permitirá que 950 kilos de fibra de vicuña sean enviados a Italia
Luego de varias décadas de prohibición y restricción del aprovechamiento de la vicuña, que en 1965 fue declarada especie en extinción al haber en existencia sólo 5.000 ejemplares, ahora, gracias al emprendimiento de manejo de la vicuña, iniciado hace ocho años, se han logrado importantes resultados, entre los que se destacan los siguientes.
A la fecha, existen 64 comunidades distribuidas en 12 municipios andinos que son parte del Programa de Manejo de la Vicuña donde cerca de 3.050 familias indígenas-campesinas están involucradas directamente.
Seis asociaciones regionales de manejadores de vicuña conformadas en los últimos tres años representan a las comunidades que hacen el manejo de vicuña (esquilas organizadas y autorizadas).
Estas comunidades realizaron más de 60 esquilas con 752 kilos de fibra de vicuña y lograron un total aproximado de 2.018.400 bolivianos en fibra acopiada.
Al margen del beneficio económico, este es un proyecto de relevancia porque tiene también implicancias de beneficios a nivel social, ambiental y legal que recién ahora son abordados a profundidad.
Las perspectivas económicas, ambientales y legales son amplias, en lo económico se destacan la existencia de aproximadamente de 60.000 vicuñas, hay la posibilidad de producir aproximadamente 3.000 kilogramos de fibra anuales, con un valor de la fibra en bruto de 900.000 dólares (7.200.000) bolivianos.
A nivel ambiental, el manejo sostenible de la vicuña, garantiza la conservación de esta especie en su estado silvestre, se hace posible un nuevo paradigma que demuestra que es compatible la conservación de la biodiversidad con el desarrollo de las comunidades. ABI
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