Lentamente, reaparece crédito para las PyMEs en la Bolsa

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Lentamente, el financiamiento a las pequeñas y me­dianas empresas comenzó a reaparecer: en los últimos cinco meses se hicieron ya seis emisiones de Valores de Corto Plazo (VCP) o deuda, en la Bolsa de Valores y se armó una gran cantidad de fideicomisos para financiar nuevos proyectos y exporta­ciones de empresas chicas y medianas. La última autorización para emitir en la Bolsa fue realizada el viernes pasado. Se trata de Editoriales Zavalía, a quien se le autorizó emitir hasta $ 1 millón y co­menzará por una serie inicial de $ 75.000 a una tasa esti­mada entre 24% y 26%. Pero con Zavalía ya suman seis emisiones que se vienen rea­lizando desde fines de julio del año pasado.

Entre ellas figuran la productora y ex­portadores de pelotas de tenis Esat SA que en julio pasado realizó una primera emisión por $ 170.000 a seis meses, pagó ese compromiso y vol­vió a emitir en dólares a 8% anual. También un grupo de cuatro productores de limo­nes de Tucumán se juntó en un consorcio denominado Frutucumán para emitir pri­mero VCP por u$s 140.000 y luego dos series más por u$s 40.000 cada uno. La tasa en dólares se ubicó en 10%.

La iniciativa de emitir VCP fue lanzada desde la Socie­dad de Garantía Recíproca Garantizar junto a la Bolsa de Comercio y la Comisión Nacional de Valores a media­dos de 2002, cuando el siste­ma financiero había colapsado luego del corralito, la devaluación y la pesificación. La emisión de VCP no es otra cosa que emisión de deuda que realizan las empresas a períodos máximos de un año y respaldadas por Garantizar, que es quien responde por la deuda que se emite en caso de que la empresa incumplie­ra los pagos.

Hasta fin de año hay otras seis PyMEs que ya han sido presentadas a la CNVy es­tán a la espera de la autori­zación final para comenzar a emitir valores. Cuando la emisión se realice sumarán nueve PyMEs que estarán cotizando en los mercados fi­nancieros, y habrá entonces más empresas chicas coti­zando luego del colapso de la Argentina que antes de que se desencadenara la crisis. Basta recordar que en todo el año 2001 sólo una PyMEs salió a cotizar en la Bolsa.

De esa forma, se está in­tentando rearmar el crédito para las empresas más chi­cas, sobre todo para aquellas que tienen la posibilidad de salir a exportar pero no tienen capital para financiar el emprendimiento.

- Ventanilla

Para facilitar la tarea, se rescató una vieja iniciativa que se llevó a cabo hace una década, cuando el actual vi­cecanciller, Martin Redrado, era titular de la Comisión Nacional de Valores: se crea­ron una ventanilla única y un manual de cotización PyME. De esa forma se busca que, para emitir VCP, las empre­sas puedan realizar todo el trámite en una sola ventanilla sin necesidad de ir primero a Garantizar, luego a la CNVy después a la Bolsa. Además, antes de iniciar los trámites, las firmas pueden solicitar el manual instructivo para sa­ber si reúnen las condiciones que se requieren para emitir deuda en el mercado.

- Sin bancos

Hace un año que estamos sin bancos y estamos tratan­do de que cientos de empre­sas vuelvan a tener la posibi­lidad de conseguir capital para sus emprendimientos, explicó el presidente de Garantizar, César Tortorella. También señaló: Este es un negocio también para invertir porque los VCP tienen mer­cado secundario, además de garantía de Garantizar y en dólares están rindiendo una tasa de 10% que no se consi­gue en ninguno de los instru­mentos para invertir que hay disponibles en los bancos.

Pero no es sólo en la Bolsa donde las PyMEs consiguen capital: a falta de crédito, los fideicomisos comenzaron a ganar protagonismo y se ha creado una gran cantidad de ellos en los últimos meses para financiar emprendi­mientos de todo tipo, funda­mentalmente orientados a la exportación.

Desde Garanti­zar lanzaron uno destinado a financiar a 38 productores arroceros ubicados en Entre Ríos, Corrientes, Chaco y Santa Fe. Este fideicomiso se denominó SecuPyME I, y fi­nanciará a estas empresas por u$s 1,5 millón. Asimismo, en los próximos días saldrá un nuevo fideicomiso integrado por productores de poro­tos salteños.