Buscan fomentar el desarrollo empresarial y la apertura de nuevos mercados internacionales. Sellos discográficos independientes, pequeñas editoriales, productoras de contenidos audiovisuales y empresas de diseño. Diversas industrias culturales y un solo objetivo: fortalecer estas pymes como actores productivos. Para lograrlo, la Subsecretaría de Industrias Culturales del Ministerio de Producción del GCBA ofrece capacitaciones que apuntan al crecimiento del sector, así las pequeñas empresas pueden difundir sus productos. Para la subsecretaria Stella Puente las ventajas de incentivarlas son muchas: "Son un actor clave y dinámico para el desarrollo de la ciudad: contribuyen a la economía local y a crear empleo, y garantizan la diversidad". Por eso, resalta la importancia de estos talleres que abarcan distintas problemáticas: "La línea de capacitación es fundamental para la promoción de las industrias culturales locales, porque permite equilibrar un poco el mercado y las ayuda a ser empresas competitivas".
Los talleres se organizan en dos grandes ejes: algunos se ocupan de fomentar la apertura de nuevos mercados internacionales, y otros se dedican al desarrollo empresarial y los planes de negocios de cada industria. Están orientados a los pequeños empresarios o desarrolladores locales, son gratuitos y el único requisito es inscribirse previamente.
Hecho en Buenos Aires
Una de las principales demandas de las pymes dedicadas a las industrias culturales y al diseño es el asesoramiento en cuestiones técnicas, como el manejo de herramientas de comercio exterior. Por eso este año, para favorecer el desarrollo de estrategias exportadoras, el gobierno porteño implementó, en conjunto con la Fundación Exportar, un plan anual de capacitación. Los talleres y las charlas -que duran entre dos y tres horas, y están distribuidos durante todo el año- apuntan a cubrir diferentes problemas con objeto de instalar este sector de la producción en el mercado internacional.
El primero de los talleres otorgó las herramientas y los conocimientos básicos de la exportación: sus aspectos instrumentales de gestión y calidad. Luego, se enfocaron en la promoción comercial y se trabajó alrededor de la importancia de las ferias internacionales, las misiones comerciales y las agendas de negocios. El siguiente turno estuvo dedicado a la exportación de servicios y la propiedad intelectual. La próxima charla se realizará a mediados de septiembre y tendrá como objetivo analizar el armado de consorcios para implementar otras formas de asociativismo que permitan mejorar la actuación en el mercado internacional.
"Tratamos de equilibrar el conocimiento teórico y el práctico; siempre incluimos la voz de empresarios que cuentan sus experiencias -explica Stella Puente-. Pero además reservamos una fecha específica para analizar empresas que hayan instalado con éxito sus productos en el mercado internacional." Este último taller se realizará a mediados de octubre y allí se verán casos de los distintos sectores de las industrias culturales.
Pero antes de empezar a exportar, muchas organizaciones tienen otras prioridades, como perfeccionar sus estrategias de gestión. Según Stella Puente, "permanentemente estamos en contacto con el sector para identificar sus demandas e incorporar nuevos temas en los talleres".
Una de las industrias que más cambió en los últimos años fue la discográfica: ahora se vende música por Internet y a través de los ringtones, y con la digitalización surgieron nuevos formatos. Por eso, los talleres abarcan tanto problemáticas de la relación entre productores e intérpretes como de derechos de autor y aspectos legales de la comercialización.
Pero muchas veces no es tan complicado hacer un disco como difundirlo. Según Javier Tenenbaum y Nani Monner Sans, dueños del sello discográfico Los Años Luz, "la inversión se gasta en la fabricación y el lanzamiento de cada título; siempre faltan recursos para armar exhibidores o hacer un disco de promoción (sampler)". Por eso, además de participar en los cursos de capacitación, presentaron un proyecto para solucionar este problema y así obtuvieron uno de los subsidios que otorga el GCBA, y que los ayudó a realizar un plan de marketing para la marca. "El resultado fue muy positivo; hicimos unos exhibidores que abrieron un montón de puestos de venta y a través del sampler llegamos a un acuerdo con una radio", explica Monner Sans.
Las capacitaciones también tienen en cuenta a las productoras de contenidos audiovisuales. Ultimamente hay mucho movimiento en este sector y los cursos contribuyen a la formación de los jefes de locaciones en todos los aspectos relacionados con las normativas y los procedimientos de filmación. En el caso de las empresas de diseño, una serie de conferencias con distintos abordajes apunta a potenciar el desarrollo estratégico y la competitividad.
Por Ana Moreno
Algunas cifras significativas según datos oficiales:
- Las industrias culturales representan el 6% del producto bruto porteño y ocupan a alrededor de 90 mil personas.
- La cantidad de discos compactos vendidos en los últimos dos años creció un 44 por ciento.
- Dos de cada tres libros se realizan en Buenos Aires.
- En 2005 se exportaron libros por casi 8 millones de dólares.
En promedio, de estos cursos participan 150 pymes.
Diario La Nación