La reactivación de la industria y el desarrollo de actividades con mayor calificación en el país impulsaron al diseño como nuevo nicho de mercado, no sólo a nivel local sino también con posibilidades de exportación. "Hay un proceso en el cual se están dando diversos factores. En términos de costos y de precios Argentina está mucho mejor; también hay como un despertar de la innovación, emprendimientos de gente joven que trabaja en una escala menor y se pretende consolidar esta tendencia", indicó el titular de la Fundación ExportAr, Marcelo Elizondo.

El funcionario, destacó además que "cualquier actividad para tener éxito debe ser desarrollada sobre la base de empresa, porque es así como se incrementa el comercio y se alienta la inversión. En ese circuito empezó a participar el diseño".

Por este motivo, el organismo dependiende de la Cancillería promueve la participación de dieñadores argentinos que ya venden a Estados Unidos y Europa en la Fashion Week México, que se realizará a partir del 7 de marzo.

"México es uno de los 5 mercados más importantes, con gran fuerza en la región, y los productos argentinos apuntarán a la diferenciación como sustento de negocios", apuntó Elizondo.

El diseño, si bien abarca desde ropa hasta estilos de muebles, empezó a surgir el año pasado como una actividad con potencialidad y busca consolidarse con la captación de nuevos mercados.

Entre las empresas argentinas dedicadas al diseño que expondrán en México, figuran Mariela Allaix, dedicada a la producción de tejidos exclusivos con elementos provenientes del campo; Laura Driz, marca de tejios y calzados lanzada hace un año, y Juana de Arco, que abrió en 1998 con su línea de noche y sastrería.

Allaix y Juana de Arco exportan en la actualidad a Japón, España, Suiza, Perú, y Estados Unidos, mercados conquistados para los diseñadores argentinos el año pasado.

Mariela Allaix, propietaria de la marca, señaló a Télam que el año pasado exportó unas 12 mil prendas, mientras que Victoria Landani, de la firma Juana de Arco, indicó que la empresa tiene dos locales en el exterior (Tokio y Barcelona), y que apunta a conquistar el mercado latinoamericano.

Por su parte, la marca Laura Driz invertirá este año unos 100 mil dólares en la apertura de un nuevo local en Unicenter y empezarán con el armado de la franquicia.

Las tres empresas de diseño, que tienen cada una entre 50 y 100 trabajadores, en su mayoría artesanos, proyectan tomar nueva mano de obra especializada, aunque sus responsables destacaron la ausencia de "un marco legal para el trabajador artesanal".

Al respecto, las empresarias tienen la expectativa de que se creen nuevas instituciones o cámaras que agrupen a los diseñadores para tener herramientas de consulta a nivel empresarial.

Sobre este punto, Elizondo opinó que la principal debilidad del diseño es "la falta de aptitud para convertirse en una empresa que actúe con una metodología adecuada y gane mercados de manera exitosa y sistemática", pero resaltó que debido al importante potencial que tiene Argentina en talento e innovación‘, habrá que trabajar en este sentido.

"El mundo percibe ese potencial, por eso habrá que mostrar los productos llevando la marca del país", finalizó el titular de la Fundación ExportAr.
Fuente DiarioHoy