Una buena combinación; materia prima de reconocida
calidad, diseños exclusivos y costos muy competitivos hacen que la industria del
calzado de alta gama esté en condiciones de pegar el salto y posicionarse como marca
argentina en los mercados más exclusivos del mundo. Razones para ilusionarse
no le faltan a los industriales: recibieron la visita de compradores de Estados Unidos,
Gran Bretaña, Italia, España, Medio Oriente, Israel, Europa del Este y de los vecinos
latinoamericanos, atraídos tanto por la calidad como por los precios que permitió la
devaluación del peso.
Para sacar provecho de estas ventajas, la
Cancillería y los fabricantes locales desplegaron una importante campaña de promoción,
que permitió atraer a 12.000 potenciales compradores locales y extranjeros a la
exposición internacional EFICA que se hizo algunas semanas atrás. Después de soportar
durante una década la competencia del calzado proveniente de China y Brasil, los
fabricantes argentinos tienen su revancha.
"Los últimos años fueron los
peores para la historia de la industria del calzado local. Si a alguna de nuestras
exposiciones venía un solo extranjero, hacíamos una fiesta", dijo el presidente de la
Cámara de la Industria del Calzado (CIC), Carlos Bueno.
CIFRAS. Para graficar aún más la situación pasada y presente del sector, el
directivo precisó que "mientras que a principios de los 90 las fábricas producían entre
110 y 120 millones de pares de zapatos anuales en el 2001 la producción bajó a 36,5
millones de pares".
Las oportunidades que se presentan para el sector,
luego de años de depresión, son sustituir las importaciones a nivel interno y
reposicionar los productos en el mercado externo.
En este momento hay
entre 80 y 100 empresas que están en condiciones de exportar y otras 40 o 50 que ya
lo están haciendo, aunque sólo a países limítrofes. "En el segundo trimestre salimos a
mostrar el producto en varios viajes que realizamos al exterior con el apoyo de la
Cancillería argentina", explicó Bueno.
Entre noviembre y diciembre
comenzará a notarse un importante incremento de las ventas al exterior, con la salida
de embarques hacia diversos destinos.
Los compradores extranjeros se
inclina por los calzados de alta gama, que son los de mayor calidad y diseño, que
compiten con el zapato italiano, el más prestigioso, curiosamente elaborado a partir del
cuero argentino. La idea de los industriales es avanzar primero en los mercados de
Europa Occidental y luego en los de Europa Oriental, siguiendo luego por otros
mercados más exóticos, como Asia y Oriente Medio, donde el calzado argentino tiene
gran aceptación.
Fuente: Diario La Razon