Con su corazón productivo latiendo en Palpalá, a unos 20 kilómetros de la ciudad de Jujuy, Ecotextil fabrica y exporta telas y productos que realiza con pelo de llama, lana de oveja de la Puna y algodón. Su meta es mejorar el sistema de producción para afianzarse en los mercados externos. Montada sobre las instalaciones que hace 50 años dieron vida a la primera hilandería y tejeduría jujeña, la firma trabaja a un ritmo industrial, pero de una manera artesanal. Una fórmula que, para sus directivos, les ayudó a dar los primeros pasos en los mercados de Holanda, España y Estados Unidos.

"Toda la materia prima con la que elaboramos los artículos se la compramos a los productores de la Puna. Las máquinas que tenemos en la fábrica son bastante antiguas y hay muchos pasos en la producción que son manuales, por eso el proceso es semiartesanal", contó la encargada de ventas de la firma, Florencia Verzini, que destacó como aspecto importante de la elaboración la utilización de insumos ciento por ciento naturales.

Paso a paso

El proceso comienza con la compra y recepción de la lana en bruto, luego se hace una selección de la misma y se la lava para comenzar con el proceso de hilado.

Ecotextil fabrica telas picotes, barracanes y productos terminados (mantas, cubrecamas, chalinas y fundas de almohadón, entre otros) en una gama de tonalidades que van desde los colores terrosos hasta otros más intensos, como el verde, naranja o fucsia.

"Tratamos de cubrir dos líneas: una típicamente artesanal y otra más moderna, con más diseño. Hacemos 2000 metros de telas por mes y 700 mantas, y si bien casi todo lo vendemos en el mercado interno, ya realizamos las primeras ventas al exterior", contó Verzini, y explicó que los pedidos del exterior llegaron de la mano de argentinos radicados afuera o de turistas que habían comprado alguno de sus productos acá. "Lo que sucede -agregó- es que las mantas de llama, por ejemplo, no se encuentran en otras partes del mundo."

Por lo general, las llamas que hay en nuestro país no son de un solo color, sino que presentan una gama de colores que van desde el negro, pardo oscuro, castaño y canela hasta el gris oscuro y gris plata. Estas tonalidades son las que después van a destacar la calidad de los productos.

Cuando se realiza la esquila, los vellones del animal son seleccionados a mano y luego son enfardados para ser trasladados a la hilandería. Se calcula que por esquila se obtienen entre 2 y 3 kilos de pelo por llama.

De cara al futuro

Sin tener, prácticamente, una estrategia en marcha, por medio de una difusión que fue corriendo casi de "boca en boca", Ecotextil vendió 5000 metros de tela y 300 mantas en Holanda, 200 mantas en España y cerca de 300 mantas en Estados Unidos.

Al referirse a los futuros planes de la empresa, Verzini contó que el principal objetivo es mejorar la producción. "Queremos poner en la fábrica los procesos que nos faltan como la tintorería y el secadero, para luego dedicarnos a mejorar nuestra presencia en el mercado internacional. Por ahora, estamos sacando telas diferentes y trabajando en nuevos diseños en los que queremos incluir pelo de alpaca o de conejo", apuntó.
Fuente: Diario La Nación